Sociedad Excursionista Javalambre
El montañismo organizado toma forma en Teruel en los años cuarenta del siglo XX, en torno a la Sociedad Excursionista Javalambre, antecesora del actual Grupo Alpino Javalambre. Sus actividades de esquí, escalada y alta montaña dentro y fuera de la provincia eran una auténtica aventura deportiva en una época de escasez de recursos y precarias comunicaciones, que eran suplidos con imaginación y mucho esfuerzo.
Abrieron vías de escalada clásicas en parajes cercanos a la capital y promovieron, a través del gran montañero Adrián Martínez, la construcción del único refugio de montaña no pirenaico de Aragón, el Rabadá y Navarro en Camarena. Sus esquís eran de fabricación propia y el desplazamiento a Javalambre ocupaba la mayor parte de la jornada.
En 1948 realizaron una memorable expedición al Pirineo guiada por el Dr. Ramón Villuendas, con ascensiones a Monte Perdido, Maladeta y Aneto. En Semana Santa de 1950 se desplazaron en tren a Riglos, donde escalaron el 1 de mayo el Mallo Firé. La sociedad Javalambre participó también en 1956, por invitación de Montañeros de Aragón de Barbastro, en la entronización de la virgen del Pilar en la cumbre del Aneto, hasta donde fue acompañada, entre otros, por un nutrido grupo de turolenses encabezados por su entonces presidente, Don Antonio Budría.
Grupo Alpino Javalambre
El Grupo Alpino Javalambre se fundó como tal en enero de 1986, tomando en la época moderna el relevo de aquellos pioneros. Tras unos años iniciales centrados en la escalada, a partir de la inauguración en 1990 del sendero de gran recorrido GR-8 emerge con fuerza en su seno una nueva modalidad montañera: el senderismo. Las marchas iniciales de fin de semana completo en condiciones de autosuficiencia dieron paso a salidas en el día o con pernoctas hoteleras más cómodas, programadas con periodicidad mensual por la junta directiva presidida por Pedro Gracia durante los últimos 30 años.
Además de las excursiones cercanas en el día, ha programado viajes de fin de semana o puentes festivos para el Pilar o Todos los Santos con destino a montañas más lejanas, dentro o fuera de Aragón: Maestrazgo, Mararraña, Moncayo, Guara, Pirineo, Serranía de Cuenca, Picos de Urbión, La Rioja o la Montaña Palentina.
Entre 2008 y 2019 se realizaron ascensiones en grupo numeroso a una docena de tresmiles pirenáicos considerados fáciles, como forma de iniciación: Robiñera, Néouvielle, Mulleres, Posets, Tempestades, Garmo Negro, Infiernos, Ballibierna, Forqueta, Russell, Culfreda y Clarabides.
Socios del club han completado en grupos reducidos numerosas ascensiones o travesías de diversa dificultad en los Pirineos o en los Alpes.
La partipación en marchas organizadas y carreras por montaña en comunidades vecinas fue el germen para la creación en 2002 de la Marcha Aragón Sur, una de las primeras de este tipo en Aragón, y del nacimiento de una sección de carreras muy potente en la última década.
El resurgimiento de la escalada y el esquí de montaña ha diversificado también las actividades que se practican hoy en el grupo.